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Id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado.
Reina-Valera 1960. 19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.
29 de mar. de 2019 · “En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén”. Con estas palabras empieza toda oración del cristiano. Con estas palabras nos dirigimos al Dios que es invisible, Uno y Trino, así como también a Sus ángeles y santos en el mismo mundo imperceptible.
Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. (Mateo 28:19) Los primeros cristianos hablaban y enseñaban sobre la Trinidad, tal como vemos en el siguiente versículo escrito por el apóstol Pedro.
30 de jul. de 2020 · Cuando Juan predicó un bautismo de arrepentimiento a la luz del reino venidero, predicamos un bautismo en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Nuestro bautismo involucra el reinado del cielo, que ahora entendemos en términos del Dios trino.
24 de may. de 2024 · El gran misterio de la Santísima Trinidad por el cual afirmamos la unidad de sustancia en las tres divinas personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo, se estudia en las aulas de teología, pero se asimila en la vida diaria de oración.