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  1. Durante su carrera, realizó cerca de 900 pinturas al óleo y más de 2.000 acuarelas, así como innumerables bocetos y dibujos al carboncillo. Su obra documenta sus viajes a lo largo del mundo, desde Venecia al Tirol, Corfú, Oriente Próximo, Montana, Maine y Florida.

  2. 4 de nov. de 2023 · John Singer Sargent, el último ícono del mundo del arte desde finales del siglo XIX hasta principios del siglo XX, dejó a todos boquiabiertos con su destreza en la pintura. Él fue el Taylor Swift de su época, pero con un pincel en lugar de una guitarra. Vamos a explorar 10 de sus pinturas más famosas y divertirnos explorando ...

  3. Pero la obra de Sargent que más delata su deuda con el gran maestro español es el cuadro Las hijas de Edward Darley Boit, realizado en 1882, donde intenta captar el aire del interior como en Las meninas. Se conserva en el Museo de Bellas Artes de Boston.

  4. 21 de mar. de 2022 · La obra de Sargent se alinea principalmente con los valores convencionales de la «respetabilidad» burguesa. Sus espléndidos retratos, influidos por la pintura de Velázquez y Manet, son verdaderos status symbol del poder de la alta sociedad estadounidense.

  5. pinturasimporesionistas.blogspot.com › un-paseo-matinal-john-singer-sargentUN PASEO MATINAL JOHN SINGER SARGENT

    La clara luz estival domina la composición de Sargent , diluyendo en un juego de matices la materia del traje y la hierba de la orilla. Contrariamente a los cuadros franceses, tanto la superficie del agua como la sombra bajo la sombrilla son interpretadas más bien como masas coloreadas homogéneas que como una superficie que ...

  6. 5 de jul. de 2017 · Si hace dos años, la National Portrait Gallery de Londres presentó una muestra de retratos realizados por John Singer Sargent (1856-1925), ahora otra sede londiense, la Dulwich Picture Gallery, se centra en la faceta de Sargent como acuarelista y como pintor al natural.

  7. Sus pinturas iban más allá de la mera expresión de la clase social, y como resultado, fue el retratista más solicitado de su tiempo. Pero en lugar de dormirse en sus laureles, Sargent siguió explorando sus intereses para dedicarse a hacer acuarelas, viajes y ambiciosos murales.